Una de esas tardes calurosas y ajetreadas en la cuidad de Nueva York, la llamada "pequeña Italia" parecia tranquila, y digo tranquila, puesto que los negocios de la mafia eran cubiertos por la famosas pizzerias, y la del viejo Tonny no era la excepcion, Mario, su barbero recien habia acabado de darle un retoque, sentado como siempre en su silla de madera, esperando clientes fueran de la mafia o los de la policia de Narcoticos, sin embargo hace mas de 6 años que ninguno de los sujetos de la policia se molestaba en pasar por ahi, no despues de aquel dia, donde habian encontrado la muerte a manos de "el italiano"...Listo para retornar a sus labores, Tonny le pide a Mario que se retire...observa con algo de nostalgia las fotografias que tenia colgadas por monton en su restaurante, acomodo el cuello de su camisa para encender un cigarrillo, cuando su vista quedo fija en el reflejo de uno de los vidrios, la puerta sono sus campaniñas, y lentamente fue emergiendo la figura de una mujer alta de cabello largo, vestida con una gabardina negra, anteojos oscuros, quien tenia un semblante serio, pero al ver la figura del rechoncho italiano, dejo ver una leve sonrisa, su calzado era ligero y asi debia ser, ya que un profesional debe estar preparado en todo momento y todo lugar, una leccion que habia aprendido muchos años atras siendo solo una niña con 12 años, ahora trabajaba por su cuenta, realizando trabajos especiales, habia estado fuera de estados unidos desde que se graduo de la escuela y habia regresado donde todo comenzo...
-"buon pomeriggio ha passato un certo tempo Tonny"-dijo la joven con un italiano muy fluido.
-" haz aprendido bien la pronunciacion, y parece que el viaje por Europa te hizo bien, -"gusto del cappello che avete restituito la giovane persona pazzesca"- dijo el viejo capo.
-"¿ que te doy? le pregunto mientras ella se dejaba " el equipaje a una orilla"
-" ya lo sabes..un vaso con leche"- respondio con un aire de nostalgia.
Tonny mando a traer la bebida de la chica, mientras esta se sentaba con el en una de las mesas, con manteles cuadriculados...rojo con blanco, donde se mantenian los menus, a la vista de los clientes...
-" sere directa Tonny, tengo una razon por la cual volvi a Nueva York, y es persiguiendo a unos sujetos de la mafia rusa, que parece tener conecxion con los policias de narcoticos de por aqui y como sabes ese lugar me las debe y no alcanzara mi vida para desquitarme...me ire cuando los haya "limpiado a todos", tambien, como sabes he trabajado mucho durante estos años que estuve fuera y he ganado algun dinero, sin embargo creo que es hora de meterlo en un banco real junto con el otro dinero que ya sabes..."- se quita sus lentes...dejando ver sus ojos, los cuales mostraban un poco de tristeza, pero tambien rabia, una rabia que no habia sacado en 6 años...
Tonny, movio la cabeza en son de afirmacion, dandole a la joven un papel firmado..esta se levanto y tomo sus pertenencia, le hizo un gesto de agradecimiento y se retiro del restaurante...
Matilda...ese era el nombre con el que me llamaron mis padres al nacer...creci, vivi en las sombras de la "gran manzana",con un padre que hubiese matado yo misma, si no lo hubisen hecho esos policias corruptos, tan solo no he dejado de pensar en mi pequeño y dulce hermano, cada dia que amanesco ahora tendria 10 años, estaria en la escuela y se, que me haria sentir orgullosa...mas murio asesinado con tan solo 4 años...
Recuerdo bien la agonia y el vacio de mis dias...sentada en las escaleras del edificio donde vivia, sin rumbo y sin ganas de buscarle un objetivo a mi patetica vida como solia yo llamarle...en eso aparecio el..
mirandome, callado, con su barba desaliñada, sus ojos cansados, su chaqueta vieja y su infaltable "maletin de viajes", parecia un "tipo rudo" y si que lo era, mas me brindo su pañuelo para que secase mis lagrimas..¿ quien era el? vivia a dos puertas de mi, ¿por que se detuvo precisamente a hablarme?...eso nunca lo entendi..me abrio las puertas de su casa, me acogio, cuando nadie lo habia hecho jamas...y ahi encontre mi objetivo, frente a un vaso con leche, un cerdito de tela llamado "piggy" y la sonrisa de aquel hombre llamado...Leon..
-"señorita? señorita?"- me dijo el taxista quien noto que me habia sumido en mis pensamientos.
-" lo siento señor, aqui esta bien, gracias"- Baje del auto, con muchisimo frio, ya era de madrugada y apenas me prestaba a descansar en un lujoso hotel cerca de Central park, donde tenia mi "centro de operaciones" un punto estrategico, no creian que una chica de 18 años, fuese capaz de andar sola en las calles, menos de pagar un hotel como ese, mas cuando vieron que mis cuentas estaban en orden, no pusieron objeccion ante un jugosa propina.
Tenia mucho por hacer, organizar mis documentos, limpiar mis armas e instalarme sin demora, ya que a primera hora, debia reportarme con mis superiores, pase practicando horas y horas fuera del colegio, en vacaciones y asi me converti en "una limpiadora profesional" con tan poca edad, eso, agregado a mi querido maestro..a leon quien se habia esperado en enseñarme lo basico, que me fue de gran utilidad, cuando tenia doce, mis manos aun eran torpes para manejar un arma, menos un cuchillo, con el tiempo los musculos se fueron adaptando, convirtiendo a mis armas en una extension mas de mi cuerpo"-
La noche antes de la muerte de Leon, Matilda, comia un poco de albondigas, viendo television, Leon, tomaba un trago,pensando en el futuro, mas, estaba conciente que su "vida de pistolero" no le daba muchas opciones de un mañana, constatemente se sentia culpable de introducir a Matilda en ese mundo de muerte y sangre, pero comprendio que eso era lo que ella deseaba, que no la obligaba a nada..
-" Matilda, quisiera que me escuches un momento..."-
La niña lo vio y se preocupo un poco de su expresion....( continuara)
Y que fue de matilda...despues de leon (parte I)
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